En Vallekas, provincia autónoma de Siberia, a 13 de enero de 2021

El último mes ha sido especialmente duro para la defensa del derecho a una vivienda digna. La subida del precio de la luz, la conducta criminal de compañías eléctricas, como Naturgy en la Cañada Real Galiana de Madrid, y la inacción de los distintos gobiernos para garantizar suministros y vivienda digna al conjunto de la población, son solo algunos ejemplos.

Las próximas semanas y meses lucharemos por una ley de vivienda que reconozca y haga efectivo este derecho, pero por desgracia sabemos que esta ley no va a cambiar sustancialmente la situación. De nuevo, nuestra lucha pasa por la organización, para que nuestra acción también sirva para forzar a la elaboración de políticas que protejan nuestros derechos.

En la actualidad, es buena noticia que muchos desahucios hayan sido paralizados hasta mayo. La pandemia, y sobre todo la presión que hemos ejercido desde los movimientos de vivienda, ha dado resultado. Pero también es cierto que estas medidas no son más que un alivio: pocas semanas de tregua que no frenarán el problema estructural que padecemos.

Las políticas de vivienda se ahogan entre gestos de buena voluntad y actuaciones que no miran más allá de un cortísimo plazo. Mientras, las grandes corporaciones financieras y el sector del ladrillo se posicionan para afianzar sus privilegios parasitando el dinero público y acumular tal cantidad de riqueza que los convierte en los verdaderos dueños del mercado inmobiliario.

Por este motivo, de nuevo familias, amigos y amigas, vecinas que nos agrupamos en torno a la PAH Vallekas, hemos decidido recuperar seis viviendas pertenecientes a grandes propietarios. Casas vacías del barrio que darán cobijo en un bloque y dos viviendas individuales de la Obra Social de la PAH a seis familias que lo necesitan y que luchan desde PAH Vallekas para lograr el derecho a una vivienda digna.

Pero sabemos que esta no es la solución definitiva. Gran parte del problema pasa por la falta de un parque público de vivienda en alquiler y por los precios abusivos que impone el mercado. Esta solución pasa por la bajada por ley del precio de los alquileres en un 40% y por la creación de un parque público de vivienda en alquiler con las viviendas que hoy se especula o están cerradas y que están en manos de la SAREB, de bancos o fondos de inversión.

Sin embargo, sabemos que esto no va a suceder en el corto plazo. No se trata de un acto de realismo, ni tampoco de desánimo, se trata de saber que es necesario poner el foco en la autoorganización a pie de calle, en la necesidad de que los movimientos ganen fuerza y creen sus propias estructuras de lucha, en recuperar viviendas para enfrentarnos con el poder de las oligarquías financieras e inmobiliarias que ponen a sus pies a los gobiernos elegidos en las urnas.

Seguiremos informando.

Un fuerte abrazo

PAH Vallekas

Una comunidad para luchar.